QUÉ VER Y QUÉ HACER EN SKOPJE. Guía básica para no c*garla
Llegar a Skopje es una experiencia en un millón. Es un nombre raro para una ciudad aún más rara. Y controversial. Cuando llegas te das cuenta que este es el chico que llegó tarde a la fiesta, pero todavía quiere ser parte de ella. Aquí tienes una ciudad que grita al mundo occidental que ellos también pueden relucir la gloria de su pasado mediante sus monumentos helenísticos, sus puentes llenos de estatuas de héroes nacionales y sus palacios, arcos y cariátides clásicas. En el centro de todo, su héroe nacional: Alejandro Magno.
Lo curioso del cuento es que en Skopje la mayoría de estos monumentos y edificios tanto antiguos como clásicos en realidad tienen unos cuatro años de existir. Y bueno… Alejandro Magno es griego. Así que ¿Cómo sembrar nacionalismo en un pasado que está siendo ajustado “a la brava” para crear unión en un país del cual la mayoría de los millenial tiene más años?
Recordemos que ni siquiera el país se puede llamar “Macedonia”, por lo mismo que no le puedes poner “Coca Cola” a la soda que acabas de inventar con zumo de limón, agua carbonatada y un toque de antiguo licor de la abuela que encontraste debajo de su cama, o Mac Donalds a tu hamburguesería casera.
Macedonia es el nombre de una región ya existente en el norte de Grecia y fue una región aún más grande de la Antigua Grecia que ocupaba también los territorios del sur de Bulgaria y la actual Macedonia.
Es por esto que el país no puede llamarse únicamente “Macedonia” y Grecia se ha opuesto fervientemente a su entrada en la unión europea si llegase a utilizar este nombre, igual que su vinculación a organismos como la OTAN. Además de un posible interés de esta república de luego reclamar la Macedonia griega poniendo en peligro al país como tal, pues Grecia conoce bien los efectos de países ultranacionalistas como este (situación que vivió con las invasiones turcas en Chipre). Esto sin mencionar que ya se han cerrado las vías férreas entre los dos países entre otras medidas de presión y hay un conflicto bilateral bastante fuerte. Sin embargo al parecer el gobierno de Grecia aceptó que se utilizara el nombre “República de Macedonia del Norte”. Anteriormente conocida como “Antigua República Yugoslava de Macedonia” (ARYM) o FYROM (En inglés). Bueno sigamos…
La respuesta está en el polémico proyecto Skopje 2014 donde se decide “renovar” el centro de la capital del país luego que un terremoto la azotó en 1963 y la dejó casi en ruinas. Pero deciden renovarlo hacia su pasado del cual no hay rastro. Así que comienzan a levantar un montón de controversiales edificios clásicos, apilados como piezas de Tetris alrededor del rio en el centro de la ciudad, mezclados con elementos contemporáneos.
ZONA MODERNA Y ORTODOXA
Así que tu recorrido puede comenzar en la Plaza Central, donde se encuentra la estatua más grande de toda la ciudad, y posiblemente de todo el mundo: El Guerrero a Caballo (confidencialmente Alejandro Magno, pero no lo pueden nombrar así oficialmente con sus disputas con Grecia).
Nunca he visto una estatua de un hombre en un caballo tan gigante como la que se alza en el centro de la ciudad. Este guerrero mira a todos desde lo alto de aquel helenístico pedestal de héroes y luchadores a orillas del rio Vardar. Y tampoco he visto tantas estatuas juntas dentro de un mismo lugar. A que puede haber una estatua por persona dentro de esta área. Además, te puedes refrescar con algunas de sus fuentes.
Por una de las calles diagonales que salen de la plaza central, se encuentra la Puerta de Macedonia. Es una especie de “Arco del Triunfo” local (construido hace también unos cuatro años). Junto con una gran plaza en donde se encuentran esculturas, resaltando el monumento a los “héroes macedonios” caídos en batalla.
Ahora, si caminas hacia el rio verás tres puentes principales, todos con curiosos detalles arquitectónicos: El Puente de Piedra, el Puente de los Artistas el Puente de la Civilización.

El más importante de los tres es el primero, que es de origen Otomano. Es el más importante porque antiguamente dividía las religiones de la ciudad en dos: ortodoxos (casi un 70% de origen étnico eslavo) y musulmanes (un 20% de origen étnico albanés) y era el único paso de un lado del rio al otro. El rio hacía de frontera, por lo que de un lado vas a encontrar mezquitas y antiguos bazares del imperio otomano y del otro iglesias ortodoxas e incluso una cruz cristiana en el monte Vodno, de la que hablaremos luego.
Una vez estés en el Puente de Piedra(Kamen Most) anímate a caminar hacia el montón de fachadas de los edificios junto al rio se apilan sin ninguna simetría como un lindo juego de dominó. Donde la fachada exterior es tan solo una vitrina hacia el mundo gritando por atención. Un palacio, al lado de un museo, al lado de un capitolio y así van llenando la orilla del rio, rematado por una cerca de estatuas de héroes “nor-macedónios” que dan la espalda a los turistas de la otra orilla.

Para ser más específicos, acá encontrarás el museo antropológico, el museo de la lucha de Macedonia por la soberanía y la independencia, el teatro, el Ministerio de Relaciones Exteriores, entre otros… Y así puedes ver a donde se fue la mayoría de la platica de ese plan Skopje 2014, que tanto vació las arcas del estado.
Encontrarás bustos, reyes, poetas, educadores, artistas y todos muy bien “ensalpiconados” dentro de las mismas cuadras. Todo esto mientras escuchas música de fondo que han puesto alrededor del rio. Haz de cuenta como un pequeño parque temático como Disney. Solo que acá observas poetas búlgaros, serbios, héroes griegos y uno que otro del territorio nacional. Pero eso sí: Todos son mostrados como si fueran de la República de Macedonia. (¿Cómo?)
Mas allá de su arquitectura Skopje es conocida mundialmente por ser el hogar de nacimiento de Agnes Gonxha Bojaxhiu. ¿No te suena? Bueno, también es conocida como la Madre Teresa de Calcuta. Y en esta ciudad puedes encontrar algunos monumentos en su honor (entre las mil y una esculturas que hay aquí) junto con su Casa Memorial de entrada gratuita. En el primer piso encontrarás una pequeña capilla y en el segundo un piso con fotos, mobiliario y reliquias que dicen haber pertenecidos a la santa.

Si leíste mi Guía de Albania, sabrás que la Madre Teresa de Calcuta es de etnia albanesa, por lo que existe un debate entre estas dos naciones sobre el verdadero origen de la mujer. Otro país con el que nuestra querida “Macedonia del Norte” se debate por el origen de la gente
EL VERDADERO CENTRO HISTÓRICO
Lo curioso es que mientras este “nuevo” centro kitsch-helenístico de tan solo unos años de edad se erige a orillas del rio y desborda con luces y fuentes apiladas tan cerca como sus monumentos unos de otros el verdadero casco histórico permea a sus visitantes de un aire de soledad y decadencia.
Este verdaderamente antiguo Centro Histórico se encuentra a tan solo unos pasos del Puente de Piedra y es maravilloso recorrerlo en especial de noche con sus bares y cafés verdaderamente antiguos. Bienvenidos al “Old Bazaar”, un vecindario “a lo Otomano”. Aunque un poco “pasados de moda” para los locales y tal vez no tan curioso como la nueva “monumental” parte de la ciudad fue una de mis partes favoritas al caminar.
Es inevitable sentir aquel aire musulmán, pues verás dentro de este barrio muchas personas que emiten este sentimiento. Es un paréntesis del mundo europeo. Pequeños establecimientos donde se toma té a las afueras y mezquitas que cantan para llamar a los creyentes a orar. Hasta el olor a especies se siente mientras pasas por todas las vitrinas de los joyeros judíos de la ciudad, que bien apilados y amañados se encuentran acá. También encontrarás un antiguo hamman convertido en Museo de Galería de Arte.
Cerca del bazar se encuentra la mezquita más importante de la ciudad: Mustafá Pasha, quien fue visir del Sultan Selim I. Su construcción fue realizada durante el año 1492. Se encuentra en la parte alta de la ciudad y junto a ella está la entrada a la Fortaleza Kale.
LA FORTALEZA DE KALE
La Fortaleza de Kale data del siglo VI y fue construida como defensa de invasores hacia este paso de comercio. Ayudó a luchar contra búlgaros, serbios, Bizantinos y Otomanos. Un terremoto en 518 la dañó notablemente, fue reconstruida en los siglos X y XI. Luego el terremoto de 1963 la dejó en su peor estado, aunque anteriormente se encuentra muy restaurada y se parece mucho a la que está en Ohrid. Eso sí con su bandera del país ondeando orgullosamente a los cuatro vientos.
Su entrada es gratuita y te da vistas bien bonitas de la ciudad por estar en la cima de una colina sobre el rio Vardar. Dentro no hay mucho: un café, un parque, una zona de camping para hacer picnics. Pero si puedes camina por sus murallas y aprecia la vista ciudad abajo.
CRUZ DEL MILENIO
Si aún te queda tiempo dirígete al monumento más alto financiado por la iglesia ortodoxa del país: la Cruz del Milenio.
Para llegar, debes tomar el bus 25 desde la Estación Central de Buses o alguna de las paradas céntricas que tiene (35 MKD por trayecto ≅ 0,60 €) o un taxi (250 MKD ≅ 6 €). Ambos te dejan en la zona para acceder al teleférico. Este te sube al lugar más alto del monte Vodno (100 MKD por persona ida y vuelta ≅ 1,80 euros).
La cruz se observa en los distintos puntos de la ciudad y por la noche ilumina lo alto del monte Vodno. Arriba tienes una zona muy agradable llena de árboles, caminos y mesitas bajo la sombra donde puedes ir a comer algo a las afueras mientras gozas de las mejores vistas de la ciudad.
LA CIUDAD DE NOCHE
Vale la pena una vez terminado el día volver a la plaza central y ver como la ciudad cambia de cara en la noche. La gente sale a los bares, las luces llenas el ambiente y alumbran las esculturas y los detalles escondidos de sus debatidas construcciones.
Anímate a pasear por los bares y restaurantes que se extienden rio abajo (o arriba), disfruta de un Rakija (bebida típica de algunos de los Balcanes) o una cerveza local y mira cómo la gente se anima y como la noche se vive en esta ciudad. Una ciudad que llama por atención y busca revivir la gloria de un pasado que reclaman como grande y épico, pero que es debatible si todo es realmente un invento.
Pero no juzgues. La mayoría de la gente de nuestra edad no se interesa mucho por estas cosas políticas. Solo quieren pasar el rato como todo el resto de personas. Mejor piensa en todo lo que esta gente ha vivido.
Pasa y deja pasar.
Me voy con ideas tan confusas como con las que llegué a esta ciudad. La verdad no sé si amarla u odiarla. Es como esa chica que tratas de ligar en la disco y no pasa de ser un “one night stand”. Muy wild y que te deja un poco desorientado cuando ves la luz del sol al otro día, pero no la encuentras en la cama.
Oh Skopje. “Mira que buenísimo que está este traje típico, mira que kitsch que están tus construcciones, pero…. No me toques”. Creo que este sentimiento “A lo Skopje” de desconcierto se implantará en más de una cabeza cuando te des la oportunidad de conocerla.